Castell de l'Eramprunyà

El castillo de l'Eramprunyá fue construido en el siglo X como parte del sistema defensivo de la frontera entre Al-Andalus y el Imperio Carolingio y como sede de control político, económico y militar en la zona entre Garraf y llobregat. Fue propiedad de los condes de Barcelona. En el siglo XV el castillo debido a las guerras queda muy dañado. A finales del siglo XIX es adquirido finalmente por Manuel Girona i Agrafel.
Pese al estado de abandono y de ruina, se pueden distinguir claramente los dos recintos en que estaba dividido el castillo. El superior (sobirà) es dónde se encontraban las edificaciones nobles. En el inferior (jussà) encontramos el cementerio, la iglesia de Sant Miquel y la cisterna. Los dos recintos están comunicados por una pasarela de madera.
Las vistas del castillo nos permiten contemplar gran parte del Baix Llobregat, el mar, el Tibidabo, Barcelona, hasta el Montseny y Montserrat haciendo evidente la importancia estratégica de este castillo.

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