Rubenshuis

El nombre lo dice todo: en el siglo XVI, esta era la vivienda del pintor Peter Paul Rubens. Pero este edificio tiene más historia que la de una casa de pintor. En su momento, incluso fue una prisión. En 1937, la ciudad compró la casa y la convirtió en museo. Así se conservaron dos partes originales de la casa de Rubens, el jardín y el pórtico.

Consejo de Simon: La taquilla es accesible para usuarios de sillas de ruedas y carritos, pero con una silla de ruedas manual solo puedes visitar la planta baja del museo. Los baños son accesibles para todos, pero no siempre son muy prácticos. También el jardín de la casa de Rubens es accesible, pero ten cuidado con los adoquines. Si los adoquines son demasiado difíciles, afortunadamente aún tienes el camino de grava para descubrir el jardín.

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