Antigua abadía de Sint-Winoksbergen

Cuando San Winoc visitó Bergues durante su misión de evangelización de la región, los condes de Flandes construyeron a partir de 1022 una abadía benedictina en el lugar de la visita del santo, con el objetivo de conservar sus preciosas reliquias y promover su culto.

La abadía se construyó sobre el «Groenberg » (colina verde), una colina de 22 metros de altura cuya cima estaba ocupada íntegramente por la abadía. Durante casi ochocientos años, el Groenberg fue propiedad de la comunidad religiosa. Se caracteriza por la presencia de dos torres : la Tour Carrée , construida en el cruce del crucero de la antigua abadía, que es hoy el edificio más antiguo conservado de la ciudad, y la Tour Pointue , situada a la entrada de la abadía.

La nave se extiende siete tramos hacia el oeste hasta una segunda torre, mientras que el coro se extiende 30 metros hacia el este de la torre cuadrada. La nave y el crucero de la iglesia son románicos, mientras que el coro, que fue completamente reconstruido en la década de 1290 , es gótico.

La abadía de Saint-Winoc es el primer edificio gótico de la región . Ha sufrido mucho a lo largo de los siglos: las guerras y los incendios la han destruido más de una vez. Se quemó en 1083 y 1123 ; en 1566, fue saqueada por mendigos... Al comienzo de la Revolución Francesa, la abadía de Saint-Winoc era radiante y próspera. Los 25 monjes que vivían allí gozaban del respeto general de la población. Se adhirieron estrictamente a las reglas de Saint-Benoit .

Muchos de los 60.000 volúmenes de la rica biblioteca se han perdido. Las obras más hermosas están reservadas a las bibliotecas municipales de Bergues, Dunkerque, Bourbourg y Gravelines. Los cuadros se han repartido por los museos y las iglesias de los alrededores, pero muchas de las obras de arte han desaparecido... ¡y bastaron unos años para arruinar el trabajo de ocho siglos!

Willem Vandenameele