Sala de cera

Famosa por sus aguas desde el siglo XVI, la ciudad de Spa atrae a visitantes de toda Europa.

La tradición de los juegos de azar es casi igual de antigua. Sin embargo, fue en el siglo XVIII cuando la moda alcanzó su punto máximo: el número de "bobelinos" aumentó significativamente y las apuestas se hicieron cada vez más grandes. Incluso había una justificación médica para estas prácticas: beber agua mineral sola no era suficiente . Para aprovechar al máximo sus efectos beneficiosos, es necesario practicar "movimientos voluntarios" como la equitación, la caza, el baile y, por supuesto , la música, el billar, las cartas y la compañía.

Muchos particulares recibían clandestinamente a los jugadores, pero la falta de espacio pronto se hizo sentir.

Una casa de juegos, la Redoute, fue construida en 1763 en el centro de la ciudad y se le otorgó una licencia exclusiva. El Waux-Hall, inaugurado en 1770, infringió así abiertamente el privilegio concedido por el Príncipe-Obispo. Después de muchos altibajos, los dos establecimientos competidores tuvieron que unir fuerzas en 1774. Una tercera casa , el salón Levoz, fue construida en 1785 cerca del Waux-Hall. Entró en conflicto directo con los dos primeros y dio lugar al "asunto de los juegos de Spa" , que fue una de las causas de la Revolución de Lieja de 1789. Este conflicto no se resolvió definitivamente hasta 1802 con la reunificación de los tres casinos.

willem vandenameele