MURALLA VILLA VELLA

Tossa de mar es un ejemplo único de ciudad fortificada medieval y al mismo tiempo la única ciudad de la Costa Brava y de toda la costa catalana que posee un nucléo medieval amurallado casi intacto, la Vila Vella Tossa. Actualmente, estas murallas han sido clasificadas como Monumento Histórico Artístico Nacional. El recinto amurallado de la Vila Vella Tossa que se extiende hasta el mar compone la imagen típica de Tossa de Mar y es sin duda su símbolo más emblemático.
Las murallas de la Vila Vella Tossa, que tenían la finalidad de proteger a la población de los ataques de los piratas, fueron construidas entre los siglos XII y XIV y ampliadas posteriormente en el siglo XVI. Las 7 torres de vigilancia albergaban vigias las 24 horas del día, los cuales advertían del peligro a la población para que buscara protección y refugio dentro del recinto. Las torres más conocidas son la Torre d'en Joanàs, que se alza sobre la cala, y la Torre de las Horas, junto a la entrada del Patio de Armas. En la época de máximo esplendor de Tossa de Mar, en el siglo XV, hubo más de 80 viviendas intramuros: algunas de ellas se construían directamente junto a la muralla y practicamente usaban el muro de la misma como pared. En el punto más alto de la ciudad antigua, sobre los peñascos, se alzó en tiempos un castillo con una torre de vigilancia que, lamentablemente, ya no se conserva. Justo en este lugar es donde se alza hoy el Far Tossa.
Recomendamos especialmente pasear por las calles de la Vila Vella Tossa: desde la misma Playa Gran suba hasta el Far Tossa, donde podrá disfrutar de una magnífica vista de los acantilados y de la ciudad de Tossa de Mar. A lo largo del camino nos encontramos, entre otros puntos de interés, con las ruinas de una iglesia en estilo gótico tardío que data del siglo XV conocida como Esglesia Vella de Sant Vicenç, junto a la cual de vez en cuando se celebran conciertos. Desde allí es aconsejable dirigirse hacia la zona en el interior de las murallas para admirar sus numerosas y enrevesadas callejuelas y sus bellas casonas. Aquí encontramos también agradables cafeterías y restaurantes.
Por la noche, las murallas iluminadas de la Vila Vella Tossa ofrecen un espectáculo sobrecogedor y sumamente romántico al visitante que se disfruta en todo su manificencia desde una de las terrazas del paseo marítimo o desde la misma Playa Gran.

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