La Entrada - Malpaís de Güímar - Tenerife

Cada año, hacia septiembre u octubre , las mareas vivas y las corrientes submarinas traen grandes cantidades de arena, procedente de depósitos submarinos del vecino caserío de El Socorro, hasta la playa de La Entrada, que en pocos días se convierte en una enorme playa de arena negra.

Desde allí son arrastradas lentamente hacia el interior desde Malpaís por los vientos alisios dominantes, hasta que las mareas vuelven a arrancar la arena y la playa recupera su aspecto más habitual. Por tanto, la playa puede estar arenosa durante uno o dos meses al año.

La arena arrastrada por el viento avanza centímetro a centímetro hasta llegar a los pies de la Montaña Grande y abarca una amplia franja que ha dado lugar a un ecosistema único y de gran importancia, habitado por una fauna y una flora muy diferentes a las del resto de la país.

Es impresionante recorrer el límite entre esta franja de arena y la lava.

willem vandenameele