La Plaza del Universo

Introducción:
La plaza del Universo es hoy una yerma plaza de cemento sin ninguna atracción más que la estatua "El Trabajo" de Josep Llimona. Pero, en el momento de la Exposición esta plaza ofrecía una visión espectacular con una gran torre, iluminación eléctrica y agua por toda la plaza que servía de acceso al Palacio del Arte Textil.

Contenido:
Si nos ponemos en medio de esta Avenida América y miramos hacia Montjuïc, a nuestra derecha nos encontraremos lo que queda del Palau de la Metalurgia, la Electricidad y la Fuerza Motriz, uno de los pabellones principales dedicados a la industria. Casi no queda nada del edificio original que fue renovado en los años 60s. Durante la Exposición se exhibieron grandes maquinarias y aparatos elétricos, luego se convirtió en los estudios cinematográficos La Trilla, que fue uno de los primeros estudios de doblaje del Estado y donde también se rodaron películas. Actualmente forma parte de la Feria de Barcelona. Enfrente del Palacio de la Metalurgia se podía ver la espectacular Plaza del Universo que, como podemos ver en la imagen, presentaba unos espectaculares juegos de luz y agua diseñados por Carles Buïgas, en colaboración con los ingenieros americanos de la Westinghouse, la casa encargada de la instalación eléctrica de la Exposición Internacional. La Plaza estaba presidida por el Pabellón del Arte Textil que presentaba stands de empresas textiles de todo el mundo, incluidos los diseñados por la interiorista Lilly Reich y el arquitecto Mies van der Rohe, de los que hablaremos más adelante. El edificio, obra de Joan Roig y Emili Canosa, fue derribado en los años 60s por problemas estructurales. Dentro del conjunto de la plaza había también la "Torre de la Luz" de 50 metros de altura con una linterna que la remataba por arriba. En 1984, durante una reforma del recinto ferial se optó por derribar la torre. A la derecha de la plaza estaba el Palacio de Proyecciones, de Eusebi Bona y Francisco Aznar, diseñado para espectáculos y pases de películas. De nuevo, fue derribado y se construyó el Palacio de Congresos en su lugar. Antes, en 1934, fue una de las sedes del quinto congreso internacional de espiritismo, del que hablamos en otro de nuestros itinerarios.

Más información:
Jordi Ferran Boleda (2002). Els Usos de l'Electricitat a l'Exposició Internacional de Barcelona de 1929. Treball de Recerca del Programa de Doctorat en Història de les Ciències, CEHIC, UAB. Setembre 2002. [en catalán]

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