Este mirador rocoso domina la confluencia del Our y el Lesse .
Cuenta la leyenda que antiguamente desde este lugar se arrojaban a las profundidades caballos viejos que ya no servían, pero en realidad eran cadáveres de caballos muertos -no animales vivos- los que eran arrojados desde esta roca y dejados como presa para los rapaces de los animales salvajes.
Fuente: Willem Vandenameele
| | Pública | Alemán • Catalán • Francés • Inglés • Italiano • Neerlandés